crumble de nísperos y fresas

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INFORMACIÓN NUTRICIONAL

Las fresas son una gran fuente de vitaminas y antioxidantes que, como su nombre indica, ayudan a proteger a nuestras células de la oxidación.

Los nísperos son un fruto rico en carotenos, vitamina C y flavonoides. Además, mejora la función hepática, ejerciendo un efecto protector sobre el hígado, y ayuda a combatir la retención de líquidos.

Las nueces son muy ricas en proteínas vegetales, magnesio, potasio, fósforo, vitamina E, ácido fólico, selenio y fitosteroles. Ayudan a proteger nuestra salud cardiovascular.

 
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INGREDIENTES (para una bandeja pequeña)

Para el relleno:

  • 6 - 7 nísperos bien grandes.

  • Unas 10 fresas.

  • Unas gotas de zumo de limón.

  • OPCIONAL: Una pizca de canela.

Para el crumble:

  • 170 gr de harina.

  • 60 ml de aceite de coco virgen extra.

  • 85 gr de nueces.

  • Ralladura de 1/2 naranja.

  • 6 - 7 dátiles pequeños (deshuesados y picados).

  • Un poquito de agua.

 

ELABORACIÓN

Precalentar el horno a 190ºC.

Pelar, deshuesar y cortar en trozos los nísperos, y trocear las fresas. Colocarlos en un molde para horno, espolvorearlas con canela (opcional), agregar el zumo de limón y revolver todo con las manos. Reservar.

En un plato hondo o en un cuenco, echar los ingredientes del crumble (menos el agua), y mezclarlo todo bien con las manos. Ir añadiendo muy poco a poco el agua, hasta conseguir una textura arenosa, parecida a un motón de migas de pan.

Poner la mezcla del crumble sobre la fruta, y hornear unos 45 minutos (hasta que esté dorado).

Retirar del horno, y dejar enfriar unos 10 minutos.